Me ha parecido un texto muy  en la línea de Sola Morales  cuando habla de la piel de las ciudades de la pequeña escala, del detalle.

 A veces damos poca importancia o dejamos para lo último pensar en  como son los muros de una casa o  qué  textura van a tener, cómo de alto va a ser?  Cómo de opaco?  Se convertirá la suma de los muros en una barrera para el peatón?  Todos esos detalle a tener en cuenta para las ciudades que pueden hacernos sentir que pertenecemos a ella o no.  Analizar y descubrir cuál es la conformación de la ciudad para intervenir en ella, que es lo que nos hace tener el sentido de permanencia.

También habla de cómo hacer ciudades no hay que dejar a un lado la línea recta, el orden no es malo. Pero como podemos conseguir entonces que las ciudades estén equilibradas en “lo informal y lo formal” .

Yo creo que sin olvidar que no estamos solos, que hay una naturaleza en la q se implanta la ciudad, “debajo del asfalto, la playa “si tenemos en cuenta nuestro entorno haremos ciudades dotadas de ese equilibrio, con un toque  de la naturaleza orgánica de la que carecen la ciudades ordenadas (atender  al  encuentro de un rio con el final de una ciudad o las vistas a la montaña…) ,atender esos detalles como algo propio de la ciudad.

Y sobre todo con un poco de sentido común, no se puede llegar al paseo marítimo y plantar una línea que bordea la playa de edificaciones de más de 3 plantas, por no decir rascacielos. Dejemos de pensar en el consumo y en don dinero.