Lo que me llamó la atención mucho en este artículo son esas dos frases:” La cantidad ha sido la causa perdida del siglo”. “La transmutación de cantidad mediante abstracciones y repetición es un fracaso”.

Estamos hablando de un siglo dónde ya no se pregunta el cómo de las cosas como que ya todo es posible con la tecnología pero que tampoco se pregunta ¿por qué lo hacemos?

Al no hacer esa pregunta se ha producido un caos total, como lo decía el autor, el caos es lo que pasa cuando no pasa nada.  Cuando no reflexionamos sobre las necesidades verdaderas de una cuidad se produce este caos. “Ahora vivimos en un mundo sin urbanismo, sólo una arquitectura, cada vez más arquitectura” => La arquitectura, al consumo del terreno, genera una modificación importante en el tejido urbano y el paisaje, que no esencialmente positiva.

Eso nos lleva a concluir que tenemos que preguntar el porqué de las cosas antes de actuar realmente sobre un terreno que puede modificar hasta nuestra concepción y memoria del espacio.

 

Queda un tema que me gustaría abordar. El proyecto de villa dall'ava de Koolhaas que ha causado una polémica en el barrio. 

La villa actúa no sólo como un objeto, sino como un marco dentro de su contexto. Proporciona un Contrapunto por el cual se puede analizar el contexto circundante. Por ejemplo, la transparencia de Villa Dall'Ava es un punto de contraste con

la opacidad de las villas vecinas del siglo 19 , el resultado que se obtiene es que ambas villas enmarcan la una al otra. Un intento de Koolhaas de marcar el cambio cultural, un alejamiento de la intimidad intensa del pasado.

La construcción de la villa ha tardado 10 años, y el dueño Dominique Boudet ha subido 9 años de juicios por los fallos estéticos de su casa y las múltiples denuncias de los vecinos. Esto nos invita a pensar y reflexionar que el arquitecto haciendo arquitectura o urbanismo es a veces como hacer arte. El arte es objetivo, puede gustar a uno y no gustar al otro. Al construir su obra, como hemos dicho antes, esto va a dejar un impacto no solo al entorno pero también a las personas y no es siempre un impacto positivo.. Así que creo que en el caso del proyecto de Villa dall'ava, Koolhaas se contradice.