Cada ciudad tiene sus propias razones para ser así, expresa los deseos, poderes y realidades de quienes la habitan.

La Utopía concibe una sociedad perfecta y justa, donde todo discurre sin conflictos y en armonía y una ciudad o territorio que sea ajusta perfectamente a esa sociedad.

Debemos entender que la ciudad siempre se encontrará en un lugar entre la realidad y la Utopía. Cada día los ciudadanos con sus actuaciones modelan la ciudad acercándola a sus deseos, sin embargo, ese deseo se encuentra en constante cambio y es diverso, por lo que, la Utopía, no solo en el tiempo, si no por su carácter idílico es simplemente irrealizable.

Imagen: Ilustración de la primera edición. Utopia, Tomas Moro. Wikipedia.