Actualmente, muchas son las ciudades que su economía se basa en el turismo: el fenómeno de la turificación, en el texto Fariña habla especialmente de la ciudad de Oporto, el turismo parecía que iba a ser la solución para que la ciudad recupere su esplendor. Se suponía que el turismo permitiría recuperar determinados centros históricos despoblados.

​Con el paso del tiempo, sin darnos cuenta, se esta perdiendo la identidad de algunas ciudadades. Los habitantes de la ciudad se ven forzados a abandonar su hogar por el aumento de precios para el consumo de la gente local y eso conlleva consecuencias negativas como el cierre de pequeños comercios sustituyendolos por grandes cadenas y por lo tanto despoblación de la ciudad.

Desde mi punto de vista, debería de producirse un turismo más moderado, y que no produzca una desvinculación entre turistas y residente  preservando las costumbres de la zona para que puedan sobrevivir los centros históricos y no ser despoblados.