01. CIUTATDELFUTURMAGAZINECI. UNA CIUDAD IGUAL PERO TOTALMENTE DISTINTA.         MARÍA RICART       /

       EL URBANISMO Y LAS LÁMPARAS DE LA ARQUITECTURA. J.L GÓMEZ ORDÓÑEZ

Que el mundo cambie a la velocidad del rayo no nos pilla por sorpresa a ninguno. Que la sociedad, las actitudes y la persona en singular varíe según las circunstancias que rigen nuestro ser no nos debería sorprender en absoluto. La ciudad avanzará dependiendo de las necesidades de la sociedad. Si la sociedad avanza, la ciudad con ella, y viceversa. Sin embargo, cuando hablamos en un aspecto más centrado como es el del urbanismo, el movimiento de la ciudad en sí misma, o la propia construcción individual, ¿por qué nos cuesta tanto asumir que todas esas utopías como la de coches voladores, restaurantes móviles o viviendas totalmente autosuficientes no son más que los hechos que acontecerán en un abrir y cerrar de ojos? (si es que no están ocurriendo ya en países más desarrollados que en el que vivimos ahora).

La supremacía imperiosa de la domótica en nuestra vida va a condicionar todo nuestro saber vivir, al igual que lo va a hacer el cambio en el transporte. Que recursos como el petróleo eran bienes que no persistirían para siempre es algo que ya sabíamos, algo que no se podía ignorar. Pero ahora, en 2019, esto es algo inminente. El petróleo se acaba. Se producirá una disrupción tecnológica-energética que marcará una nueva era. ¿En mi opinión?, lo mejor que podría pasarnos; lo que significa el coste del petróleo para cada individuo que tiene que moverse, la polución que está matando el planeta, etc. El fin del petróleo comenzará para 2020, cuando caerá tanto, que su venta sea inviable ya que las pequeñas petroleras (como Noruega) no podrán competir en el mercado, y las grandes (como Arabia Saudí) tendrán que bajar tanto el precio de sus depósitos que al final cesarán su venta. Sin embargo, todas estas compañías ya plantean otras soluciones como la energía solar en países en los que haya suficiente sol, y energía eólica en los países nórdicos.

La energía solar será la gran potencia de la nueva era; según afirma el analista y profesor Tony Seba. Este recurso natural va a darnos más de una alegría. Principalmente, y a favor del urbanismo, porque no ocupa espacio. Es decir, las placas podrían estar desde en la cubierta o ventana de tu vivienda, hasta en el vehículo que está en la calle. Lo del vehículo y el tema del transporte en general, también sufrirá un cambio radical con este nuevo recurso principal. Los coches serán autónomos y eléctricos, y en contraposición con el 4% del tiempo que transcurre un coche circulando a día de hoy, para 2030, ese porcentaje se convertirá en 40%. Todo esto afecta directamente al espacio de la ciudad. No existirá la necesidad de parkings, y se podrán convertir esos espacios en zonas verdes u otro tipo de zona dependiendo de lo que la sociedad demande. Todo esto tendrá su impacto económico también obviamente. Cada familia ahorrará una media de 8.000 euros al año, ya que los coches individuales irán desapareciendo. Algo queda claro; si el siglo XX fue la era del transporte, ahora comienza el tiempo del peatón.

Me imagino, las calles llenas de plataformas elevadas que sean de uso peatonal, que conecten un edificio con otro, y azoteas con zonas verdes. Me imagino anillos verdes que sirvan de pulmones para recuperar la salud de la ciudad, que durante tanto tiempo hemos estado destruyendo paulatinamente, y que ahora, con la condición de la energía solar, tenemos la posibilidad de sanar. Concibo unas ciudades inclusivas, nada de barrios discriminatorios, ciudades donde empiecen a desaparecer suburbios que, al fin y al cabo, no tienen otra misión que dividir una sociedad económica; imagino un pluralismo y una diversidad social en lo que acontece a la estructura de la ciudad.

Si puedo sacar algo en claro, es que la ciudad debe expresar los valores de su tiempo. Que el urbanismo tiene que servir como nexo de conexión entre lugar, hombre y tiempo. Pero, ¿qué camino seguir para la construcción de la ciudad en esta nueva era? Para mí, lo más importante es, lo que considero, la condición lícita del urbanismo: estar al servicio del hombre.

02. EL ARTE DE PLANIFICAR EL SITIO . LYNCH, K.

La parte principal a la hora de empezar a proyectar es el conocimiento del terreno. Saber las características de ese espacio, saber sus virtudes, sus puntos débiles. Tendríamos que centrarnos en ese lugar hasta el punto de que pareciera que vivimos ahí desde que nacimos. Saber de la gente que lo habita, estudiar su meteorología, su vegetación, su fauna, su cultura… A menudo se cometen fallos al pensar que un mismo edificio construirse de la misma forma en Granada como en Londres, pero no. La persona que diseñe el espacio debe saber que antes de proyectar se debe conocer el terreno, y a partir de ahí, comenzar el diseño. Esto no quiere decir que la planificación del sitio, el cómo está comprendido, dividido, etc deba estar planteado de la misma forma que el diseño urbano, no es así. Lo que se intenta hacer entender es que existe una relación entre ambos.

Para mí, el aspecto más importante del entorno, es el hombre que lo habita, puesto que funcionan en conjunto ambos aspectos.

03.LOS EJES EN EL PROYECTO DE LA CIUDAD. ROSA BARBA CASANOVAS     /

     LA CALLE EN ESPECIE DE ESPACIOS. GEORGES PEREC.

La persona que va a proyectar el espacio siempre va a ir reconociendo y buscando un espacio que siga un orden determinado. Con esta idea de imponer orden en el caos, se establecen ejes en la ciudad. La función de los ejes será agilizar el transcurso de la ciudad y las intercomunicaciones que encontramos en ella. A parte, favorecer al desplazamiento entre las distintas zonas de la ciudad, favorecer esa movilidad de una punta a otra, será otra de sus funciones. Por lo tanto, el eje será un elemento ordenador que aportará una estructura determinada a la ciudad, y no por ello la limita, ya que la ciudad puede ir surgiendo a través de estos ejes, ya que la única función de estos es estructural, la columna vertebral de la ciudad. Además, sirve para estructurar otros ejes menores que forjarán la ciudad.

Estos ejes nos van a delimitar y nos van a señalar también, por donde irán las calles que se definen como espacios bordeados y que no pertenecen a nadie. Las calles, con todas sus características, formas, y personas que las circulan, se convertirán en el eje vivo del lugar.

04. LA CIUDAD NO ES UN ÁRBOL. ALEXANDER, C    /

     LA ARQUITECTURA DE LA GRAN CIUDAD. HILBERSEIMER, L.

Existen ciudades que han ido organizándose de una forma natural, en torno a un núcleo, como Liverpool, sin la necesidad o el requerimiento de una organización y planificación previa. También podemos encontrar ciudades artificiales (New Towns), que han sido organizadas y planificadas. En esta última falta el factor humano, lo más importante de la ciudad, las relaciones entre las distintas personas, que son, al fin y al cabo, las que crean la cultura y la sociedad de un sitio. Al imponer una estructura determinada en un sitio, se está limitando el lugar. Esto me parece un error gravísimo, ya que la arquitectura nunca debería ser delimitadora, sino que debería dar la libertad necesaria para la época, y la que la sociedad requiera.

Las grandes ciudades pueden ser planificadas o no, y ambas opciones tienen pros y contras. La ciudad grande planificada tiene el pro de que debido a su diseño y al haberla pensado antes de llevarla a cabo, ahora tienen un margen más amplio en cuanto a soluciones, para los posibles problemas que se planteen. Crecimiento de la ciudad, catástrofe meteorológica, etc. Lo malo de una ciudad planificada es la monotonía y el cansancio que produce salir a la calle y ver lo mismo siempre. La calle puede servir como método de desconexión y no al contrario.

Así, intervienen unos factores muy importantes para hacer de una ciudad, una “gran ciudad”, como son, el número de personas, habitantes, las condiciones económicas, desarrollo industrial y el capitalismo en general. El capitalismo es la base de la sociedad, pero a la vez se convierte en el condicionante que más abusa de la ciudad.

05. LOS NUEVOS PRINCIPIOS DEL URBANISMO. ASCHER, F   /

      CIUDADES CORTADAS. SOLÁ-MORALES, M.

Según Ascher, el nuevo urbanismo se trata de unas series de pautas a seguir, entre las que encontramos:

1) La utilización de dispositivos (como pueden ser personas, o mecanismos), que elaboren, discutan y negocien planes de diseño.

2) El reconocimiento del lugar durante todo el proceso del proyecto.

3) Tener en cuenta el desarrollo sostenible.

4) Realizar un urbanismo integrador, que no discrimine, en el que haya cabida para todo el mundo.

5) Crear un urbanismo en el que convivan las diferencias de cada uno.

6) Proyectar con libertad en el estilo.

7) Ser capaces de hacer sentir con el urbanismo. Hacer partícipes a todos los sentidos.

En líneas generales, nos expresa un urbanismo concienciado con las personas, con la sociedad. Un urbanismo solidario lleno de dispositivos que también lo deberían de ser. Los dispositivos en lo más importante, el punto principal de todos estos tips que nos da el autor. Ya sean las personas o los medios, o las circunstancias que se dan, el dispositivo es lo más valioso para el nuevo urbanismo.

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Por otro lado, en el texto de las ciudades cortadas, de Solá Morales, se habla principalmente, de cómo el arquitecto añade, nunca resuelve. Comienza dando unas pautas generales para atajar el problema de resolver el urbanismo. Se centra en la diferencia entre fragmento y corte; alegando que fragmento está relacionado con una pieza aislada y corte es una secuencia que aporta continuidad, y que así es como se debe ver la ciudad, como un corte. La sección urbana es pensar en planta y alzado a la vez. También se hacen metáforas con hacer de la corbata el corte de la ciudad. La corbata, lo único que puede aportar esa libertad y personalidad al traje de una persona, hacer de esa pieza única y portadora de estilo, la sección de la ciudad.

06. BUSQUETS. J, UNA NUEVA MIRADA AL PROYECTO URBANÍSTICO

El catálogo es un resumen de diversas investigaciones ensambladas para abrir una reflexión sobre el trabajo en el espacio urbano. El texto gira entorno a esta definición de catálogo. Este catálogo realiza una taxonomía sobre las formas de diseñar la ciudad y el territorio. Siempre que leemos un libro o texto que pronostica, el nuevo urbanismo, nos preguntamos si ese nuevo urbanismo es válido para todo el mundo. Es decir, consideramos que cada urbanista va a proyectar en el territorio suponiendo lo que él considera mejor; por esa misma razón, con ¿qué validez adoptamos lo que nos dice Busquets sobre cómo mirar al nuevo proyecto urbanístico?. Pues bien, lo que nos muestra el autor del texto no son más que unas pautas que nos pueden encaminar en el proyecto. No nos está dando unos tips que nos predestinen a lo que él considera mejor, simplemente, al igual que nos ayudaría un profesor competente en clase, nos guía para poder encontrar por nosotros mismos, nuestro estilo, sin tener que crear en nosotros mismos la necesidad de proyectar como él. Durante el texto, nos crea 10 tipos de visiones propuestas que crean riqueza cultural.

1. Edificios clave con sinergias urbanas/proyectos estratégicos.
2. Grandes artefactos urbanos.
3. Proyecto minimalista.
4. Espacio urbano/ paisaje dentro de la ciudad
5. Proyecto urbano
6. Enfoque “revival”
7. Proyectos paisajísticos a gran escala. Descentralización.
8. Rehabilitación urbana.
9. Master plan urbano.
10. Poryecto experimental.

07. DE SOLÁ MORALES, M. PRÓLOGO UNWIN.

Raymond Unwin fue un ingeniero, arquitecto y urbanista inglés que puso mucho énfasis e interés en la mejora de la vivienda de la clase obrera. Realizó Town planning in practice que es una introducción al arte de diseñar ciudades y suburbios.

En el prólogo se comenta cómo todo lo que conforma el territorio, pasa a ser parte del estudio de urbanismo ( como el suelo, por ejemplo). Habla también del arte del emplazamiento y de la importancia que tiene este estudio, que en mi opinión no es un solo un estudio previo al proyecto u obra, sino que es un estudio además de ser previo, es un estudio de cara al resto de la historia.

Pero el tema principal, es la diferencia entre formalismo e informalismo. Ambas tienen pros y contras. El formalismo se apoya en las leyes, en el trazado, en el orden y en el clasicismo; mientras, el informalismo se apoya en el lugar, en la edificación que hace diferencias con sus contrastes, la parte sensorial, etc. Unwin, personalmente, plantea un mix con lo mejor de cada movimiento un “ubanismo en práctica” como él opina. Por esto mismo, admira los matices, los aspectos útiles, hermosos y prácticos y “desmitificar” ideas.

En mi opinión, obviamente pienso como Unwin, una mezcla de ambos movimientos sería ideal, crear un orden o jerarquía en el lugar, pero teniendo en cuenta sus necesidades y lo que pide el terreno, para mí, es lo propio. Aun así, si me viera obligada a quedarme con uno de estos movimientos sería con el informalismo, ya que considero que a veces, un recorrido bello, que sorprenda, que tenga entrantes, salientes, curvas, etc puede ser más interesante y satisfactorio que algo que está totalmente planificado dentro de un orden que no presta demasiada atención al sitio en el que está emplazado.

A continuación, voy a exponer una imagen que resumen el debate que hemos tenido en clase, y del que fui parte del tribunal.

Aquí podemos ver varias ideas positivas y negativas de ambos movimientos y los diferentes puntos de vista de mis compañeras y compañeros.

08. SOBRE LA NOCIÓN DEL TIPO. MONEO, R.

Durante el texto, vemos la reflexión sobre cómo va cambiando el concepto de “tipo” respecto del tiempo, cómo evoluciona, y sus significados.

Moneo habla de que el “tipo” es el concepto que une varias características compuestas por una misma estructura. El concepto empieza a verse en las teorías de Durand en el s. XVIII y va evolucionando hasta el día de hoy.

En mi opinión creo que esto del “tipo” se puede entender de dos formas distintas.

1. El tipo puede ayudarnos ya que para proyectar, en la arquitectura, está bien que nos basemos en lo que ya hay, que busquemos información, que estudiemos lo que ya se ha hecho para a partir de ahí crear un estilo, y aprender de lo que hay que hacer y de lo que no. Que existan los “tipos” en la arquitectura es muchas veces muy útil para nosotros.
2. El tipo a veces puede servir de jaula. Me refiero, puede que ese “esquema” de tipo, no nos permita tener la libertad que la arquitectura nos requiere. Puede ser que el hecho de encasillarnos en algo haga que no podamos ser fieles a lo que queremos proyectar debido a esas limitaciones.

En conclusión, el tipo nos ayuda y hace que podamos basar y datar a nuestro proyecto desde un punto histórico y referencial, pero considero que como arquitectos tenemos que tener las menos trabas posibles para poder proyectar lo que nuestra mente quiera.

09. TRAZAR EL TERRITORIO. Prof. J.L. Gómez Ordóñez

Trazar el territorio sobre el que se proyecta no se puede llevar acabo sin más. Todo trazado es resultado de un estudio previo del terreno, y tras ese estudio, se deben seguir diferentes “tips” o pautas para trazar de una forma correcta. Además, el trazado se puede entender de diferentes formas.

1. “Trazar camino es crear y relacionar lugares”

Es recomendable, colocar hitos para poder referenciar el camino, que sirvan de orientación y que además pueda favorecer a las relaciones entre los recorridos. La inter-relación entre hito y recorrido se exige en el trazado. Es importante que el hito sea significativo del lugar.

2. “Trazar es trenzar”

Existe una acumulación de relaciones, tras el primer punto. Hay mucha unión y confluencia de diferentes cosas, de cosas totalmente diversas, por lo que el trazado debe presentar una simplificación de toda esta diversidad que nos ofrecen los recorridos, ciudades, etc.

3. “Trazar es trocear”

El trazar también se encarga de delimitar y parcelar. A lo largo de la historia, desde la ciudad en Roma hasta Cerdá, hemos visto parcelaciones en formas de mallas o retículas que delimitan el territorio y lo trazan, desde una idea multiescalar que ofrece la visión de que lo pequeño es subdivisión de lo grande.

4. “Trazar es medir”

Al tratar el tema de la escala en el punto anterior, nos damos cuenta de que las escalas ofrecen un cierto ritmo e intervalos en el trazado, que dan medida a esa distancia del territorio y de esa forma se trazan las diversas velocidades de la ciudad, al igual que lo hacen las diferentes naturalezas o gérmenes.

5. “La geometría de los trazados”

Sobre la retícula que se ha hablado antes, siempre surge una predisposición en forma de retícula que deja ver formas triangulares, cuadradas y hexagonales. Varios maestros de la arquitectura como Le Corbusier, han sido capaces de enriquecer la forma de la retícula, así lo vemos en algunas de sus obras y proyectos. Es importante trazar dentro de una geometría en la que confluyan márgenes o bandas anchas para que el proyecto finalmente pueda ser considerado como proyecto unitario.

6. “Trazar, ejercicio de síntesis”

Como conclusión de esto, tenemos la síntesis, que su propia definición nos habla de “cosa compleja que resulta de unir distintos elementos que estaban dispersos y separados organizándolos y relacionándolos”. La síntesis de los anteriores 5 puntos, es el punto 6.

Trazar es una manera de relacionar el territorio entre sí, con la utilización de hitos que nos ayudan a trenzar y buscar la relación de lo diverso, troceando el territorio para a la vez buscar un orden en él con ayuda de la escala y la geometría de una malla/retícula que crea un espacio y conforma un territorio.

10. EL URBANISMO DE LOS 800 M. J.L. GÓMEZ ORDÓÑEZ

El texto empieza con una cita de unos arquitectos que enfrenta el diseño curvilíneo y el lineal; siendo el curvilíneo mejor ya que aporta más diversidad que el otro.

A continuación, se habla de la forma de medir el espacio, que siempre ha sido elaborada por el ser humano según su propia escala. Desde los romanos hasta el día de hoy. Media milla=800 metros (se supone que esta medida es interesante para el urbanismo), yo supongo que es interesante ya que es una medida asequible, una medida que en velocidad son como 10 minutos andando para cualquiera de nosotros, una medida cómoda para por ejemplo cualquier avenida, como es la Gran Vía de Colón de Granada. Se van dando ejemplos en el texto sobre territorios ordenados según la media milla, como el suelo de los países bajos, o la utilización que hace Frank Lloyd Wright de esta unidad de medida para Broadacre city, su ciudad utópica, para ella, también se apoya en el módulo de la milla.

Esta medida va a cobrar importancia en el urbanismo a lo largo del s. XX. Por ejemplo, Perry (urbanista) propone la idea de la unidad vecinal, que se trata de dotar e incorporar a la vida familiar los servicios básicos, como las escuelas, siendo éstas mismas el centro de la distribución de la ciudad, reforzando este diseño con un análisis de la movilidad del lugar.

Después se habla del límite y la continuidad, que los huecos que hay entre los diferentes edificios o parcelas crean intervalos que depende de nosotros diseñarlos como un límite o como algo que será continuo. Por ejemplo, la calle comercial.

En mi opinión, crear continuidad es una misión que todo urbanista debe tener en mente, crear ritmos pero sin tener que interrumpir un recorrido es mejor, en mi opinión que ir interrumpiendo el trayecto.