Las hof o grandes complejos multifamiliares de vivienda social pública surgieron como respuesta del gobierno socialista vienés al problema de la creciente población de la ciudad. Así pues, se desarrolló un ambicioso Plan de Vivienda Pública entre 1923 y 1933.

Uno de estos edificios construidos fue el impresionante Karl Marx Hof, planificado por Karl Ehn (discípulo de Otto Wagner), el cual alberga 1382 viviendas en 156000 m2. Su alta densidad, los patios ajardinados interiores y los servicios que se proporcionaban en el mismo convirtieron al conjunto en una ciudad independiente dentro de la propia ciudad, ocurriendo algo similar en el resto de viviendas sociales.

Las hof, concebidos como “palacios obreros” debido a su monumentalidad, buscaban llegar a trascender en la arquitectura. Pretendían establecerse como una nueva tipología de arquitectura social, siendo la fórmula atractiva desde el punto de vista urbanístico, reduciendo la superficie edificada de las manzanas para dejar paso en su interior a estas extensas zonas verdes que se veían privatizadas. Sin embargo, no puedo evitar observar lo utópico del asunto, pues hay que tener en cuenta los criterios de selección de inquilinos, que favorecían a las clases de menor poder adquisitivo y con mayores problemas económicos, por lo que estas viviendas pueden llegar a verse relegadas a guetos.