Lo que más me llama la atención es el estudio general que Alexandre hace de varias ciudades y como todas por mucho que busquen la distinción entre una ciudad y otra con nuevas formas y proyectos urbanos, la raíz de todas ellas es la misma, sectorizando según la importancia, centro, hitos, nodos , barrios residenciales, barrios mas conflictivos, etc, sin generan varios puntos en una misma ciudad que se puedan concebir como microciudades con todos las características de una sola. A todos los niveles, vemos como se organiza todo en rangos, desde los puntos mas altos a lo relativamente menos importante. El modelo de ciudad contemporánea que plantea que haya relación entre todos esos puntos, sin crear grupos cerrados, y en cierto modo beneficia porque contribuye a que toda la información fluya de forma más rápida y se unifique ese todo en cada uno de los individuos, lo que hoy día llamamos globalización. Pero también tiene su crítica negativa desde mi punto de vista, que tiende a igualar las ciudades y personas y romper con la diversidad y el carácter de cada lugar, por ejemplo, rompiendo lugares emblemáticos de una ciudad, como en el caso del Suizo en Granada, por cadenas de comida rápida internacionales que se sitúan en cualquier parte del mundo y sin ningún valor arraigado al lugar. Otra cosa que me llama la atención es como en el centro de las grandes ciudades, en concreto las calles comerciales, se disponen de la misma forma en ciudades muy distintas ,y al pasear por ellas, se pueden situar en cualquier parte del mundo, rompiendo con la tradición de en este caso, la calle en la que se sitúan , producto de la globalización y de el ímpetu de conectar todo con todo.