A lo largo del curso hemos ido aprendiendo y descubriendo conocimientos e información acerca de la ciudad. Estos conocimientos me han abierto la puerta a un conjunto de ideas que no conocía esperaba. Reflexionar sobre nuevos conceptos y descubrir las distintas relaciones que hay entre las partes y funciones de la ciudad me ha hecho cambiar mi perspectiva a la hora de ver la arquitectura.

Desde esta nueva forma de mirar los proyectos, pienso que el trabajo principal de un arquitecto es resolver los problemas y mejorar los entornos donde trabaja, hacer lugares mejores, ya sea un pequeño proyecto o una gran intervención urbana. Cada nuevo proyecto, y cada revisión de uno antiguo deberá que ser entendido como una pieza de una gran máquina que va a repercutir en la vida de mucha gente y durante muchos años, por lo que es obligatorio hacerlo bien y con calidad.

Para hacer lugares mejores considero vital la formación, nunca dejar de aprender, de ver nuevos proyectos, buscar nuevas salidas a los problemas que siempre han existido. Los problemas de la ciudad son tan complejos que no hay una solución única, por lo que es imprescindible seguir buscando la manera de resolverlos de una forma más eficiente. Considero importante para el desarrollo de nuevas ideas el que los arquitectos y cualquier profesional que trabaje sobre la ciudad estén en contacto, el dialogo y el debate entorno a los conceptos me parece muy enriquecedor para el resultado de los proyectos.

Por último, creo que la arquitectura y el urbanismo influyen en todos los habitantes de la ciudad, pero muy poca gente tiene conocimientos, ni siquiera básicos sobre este tema. Me parece obligación de todos los arquitectos acercar la arquitectura y el urbanismo a todos, ya que si todos tenemos el objetivo común de hacer mejores ciudades y sabemos como hacerlo la meta estará mucho más cerca.