Desde que comenzamos la carrera nuestra visión de todo cambia, tanto es así que el simple hecho de caminar por cualquier ciudad hace que nos fijemos en como se organizan las calles o en que posición se encuentran los elementos que componen
una plaza.
En algunas ocasiones tenemos la sensación de que es agradable pasear y en otras nos es bastante monótono y aburrido. Y esto no se debe a una mera casualidad, si no que se debe al diseño, si es que tiene, el urbanismo de dicha zona.
La rectitud de las calles no implica que sean cómodas para el que camina por ellas, pues en mi opiníon es mucho mas entretenido perderse por las callejuelas de Venecia que caminar por los interminables Campos Elisios. Cada uno tiene una belleza distinta e incomparable a la otra.
En mi opinión el trabajo de un arquitecto en el campo urbanístico es ver la ciudad como si de una casa se tratase y hacerla lo más armoniosa y acogedora posible; ya sea a modo de cuadrículas como en Barcelona o en forma de ciudad lineal como la de Arturo Soria.
* Foto portada: Barcelona en vista aérea. Obtenida a través de Facebook: Nicanor García.