El texto contempla una gran variedad de aspectos formales de la linealidad del tejido urbano. Los ejes son líneas que resuelven la ciudad en planta. Estos ejes están atendidos como  grandes rectas monótonas que salen del centro de la ciudad, a las cuales están conectadas las calles secundarias de la ciudad, que nos conducen por la ciudad. No todas son rectas y anchas como las de París de Haussman, también las hay con quiebros con la intención de sortear edificios como es el caso de Regent Street de Londres.

Un eje no debe atravesar una ciudad y unir dos puntos periféricos, debe ser estético, evitando la monotonía. Debe de unir nodos aunque no sea de una manera marcada. Debe dar vida a la ciudad u no crear una autovía dentro de la ciudad.

La ciudad no debe construirse a partir de un eje sino que el eje debe adaptarse a la ciudad, además debe conectar sus puntos más importantes aunque sea de manera más indirecta. Debe ser también una manera de transporte útil para los peatones.