Las comunidades utópicas también llamadas Falansterio fueron intentos durante el siglo XIX y primera mitad del siglo XX de crear a una escala reducida una comunidad basada en principios de colaboración, propiedad colectiva y una organización racional del trabajo y la vida social. En síntesis una utopía en la vida real. Se basaban en principios del naciente socialismo y en algunos casos del anarquismo. La palabra utopía fue utilizada por Tomas Moro haciendo referencia a un lugar maravilloso donde existiría una organización perfecta. En este fragmento del texto Tomas Moro nos describe un lugar ideal, cuyas características geográficas favorecen al desarrollo del lugar, en el que no se muestra ningún problema ecológico y  en el que socialmente se ayudan todos entre ellos. El trazado de sus calles responde a un desarrollo natural, las casas responden a la dignidad humana, y en la que nada pertenece a nadie si no que se trata de un bien compartido y común a todo el mundo. Sin embargo tal y como dice el fragmento me parece una simple ilusión, ya que una ciudad no podría funcionar gracias a un programa, una ciudad precisa de naturalidad, de sorpresa, la organización nos hace que se nos escape un mundo el cual se presenta restringido por el orden. Incluso se restringe el crecimiento demográfico, la ciudad debe desarrollarse a partir de lo que nos rodea, debe crecer y debe adaptarse a los nuevos sucesos que nos rodean. Me parece un fragmento fíctucio muy interesante, que te hace pensar sobre el concepto de ciudad, pero a su vez como algo irreal. Se ha llegado incluso a intentar controlar a través de una ciudad inteligente en Corea del sur desde las comunicaciones hasta el clima, algo que incluso podría tener influencia deas de Le Corbusier y de las ciudades-jardín, sin llegar a su ejecución porque se quedan en simples planes idílicos pero que a su vez nos hacen analizar el concepto de ciudad.

Imagen obtenida de :  http://www.arqhys.com/arquitectura/construccion-ciudades-utopicas.html