Como este vídeo nos mostraba, la pregunta de la que todo urbanista parte y aspira a conseguir es la de ¿como medir la felicidad?, ¿como conseguirla?. Hay muchos arquetipos en los cuales podemos decir que la felicidad se consigue teniendo todo a mano en la ciudad, no necesitar el coche para nada. poder moverse por ella con total libertad. ¿Pero como podemos conseguir ordenar el espacio urbano a través del tiempo partiendo de urbes que le dan importancia al coche y desprecian al peatón? La respuesta es simple, CAMBIAR de mentalidad.

Muchas de las grandes urbes actuales como puede ser Nueva York o Daca se están enfrentando a este problema y ambas intentan cambiar la forma de pensar en la ciudad. Centrarse en la escala humana. Querer conseguir la cualidad urbana orgánica. La simbiosis de la ciudad con las personas.

Todo esto suena realmente bien, pero llevarlo a cabo es mas difícil de lo que pensamos. A pesar de que estamos priorizando el peatón frente al vehículo, no se realiza a gran escala ya que intervienen otras ramas (económicas, políticas) que retrasan el cambio.

Por lo que se puede resumir en querer cambiar el planteamiento de la ciudad, en una para las personas que son al final las que viven en ellas. Son estas las que dotan a la ciudad de identidad no el coche.