Cada vez con más frecuencia y teniendo bastante cerca el ejemplo granadino, se nos plantea la posibilidad de una revolución en el transporte.
Cuando hablamos de este tipo de revolución, el principal abanderado del cambio suele ser el metro o en su defecto el tranvía. Pero, ¿hemos pensado detenidamente si todas las ciudades que se lo proponen necesitan realmente este tipo de transporte?
Ejemplos buenos claro que podemos poner, nadie se cuestionaría dejar a Madrid o a Barcelona sin metro, o a Sevilla sin tranvía si apuramos (ahora que está consolidado, pues al principio no las tenían todas consigo con dicho proyecto). Lo que no tenemos tan claro es si ciudades más pequeñas podrían optar a él. Es el caso de municipios como Jerez de la Frontera.
Las comparaciones son odiosas y odioso suele ser que comparen a Sevilla con Jerez en tantas ocasiones cuando en muchos aspectos se parecen tan poco. Muchas voces son las que se han oído diciendo "Sevilla también tiene tranvía". Quizá haya que plantearse tal vez, y para ello no hay necesidad de una reflexión muy sesuda, que Jerez no tiene ni la población de Sevilla, ni su superficie, ni sus infraestructuras, por mencionar cosas.
Llegamos entonces al segundo apartado de la cuestión: viabilidad del proyecto. Si miramos el tema económico, a día de hoy sería inviable (estamos hablando de un municipio con un paro del veinte por ciento antes de la crisis, un nivel de endeudamiento de los más altos de España y con una huelga de servicios un día sí y otro también).
Si nos centramos en el tema ecológico, muchos dirán que el tranvía puede ser el medio más sano para la ciudad. Cosa del todo cuestionable, ya que habría que sopesar el impacto medioambiental que supondrían todas las labores de adecuación y de construcción de infraestructuras; esas labores de las que nadie oye hablar pero que al final duelen igualmente.
Si pensamos en la vida de la ciudad, observamos que el proyecto contempla la peatonalización de la calle honda. Dicho movimiento no tuvo otra cosa que detractores, pues esta calle es una de las pocas vías principales que quedaban de acceso al centro de la ciudad. Los casi tres años que duró cortada esta calle los comercios no solo de la vía, sino de sus alrededores se resintieron de manera muy significativa, a la vez que todo el tráfico privado y público tuvo que desviarse de forma forzada y poco limpia. Cortando esta calle se había estrangulado el centro de la ciudad y sus comercios, inutilizado un nudo de comunicaciones, sobrecargado otras calles que no estaban preparadas para ello y favorecido la zonificación del municipio.
Afortunadamente para muchos, el proyecto se detuvo este año pasado y con él llegó la vuelta a la normalidad. El actual equipo de gobierno de la ciudad remitió a la Junta de Andalucía una misiva en la que se solicitaba la renuncia a tal proyecto (era conjunto entre el ayuntamiento de Jerez y la Junta). Aún está por ver en qué quedara todo, pues son gobiernos de signos distintos y con propuestas distintas los que tienen que ponerse de acuerdo, pero esto es harina de otro costal.
En vista de lo ocurrido, se me ocurren unas posibles soluciones al problema planteado.
Soy de Jerez, pero vivo en Granada desde hace cuatro años y tras largos períodos de esperas, transbordos y paradas he podido comprobar que el autobús de Granada (a mi juicio a veces hay incluso demasiadas paradas), funciona mucho mejor que el de Jerez.
Por ello, creo que esfuerzos de este tipo deberían ir dirigidos a una mejora de la flota y de las líneas que ofrecen los autobuses de Jerez. Hay veces que se echa en falta un recorrido más específico o varias paradas más en una línea en la que si te pasas de marquesina, te toca andar casi media hora por culpa del despiste.
Jerez tiene en varias zonas muchísimo tránsito de transporte privado, a veces incluso en los mismos lugares en los que hay un nudo de líneas de autobús. He podido comprobar en más de una ocasión que hay mucha gente que se monta por vez primera en el autobús y que cae en la cuenta de que el trayecto en este transporte le ahorra tiempo y dinero. ¿Por qué no apostar entonces por políticas de información para los ciudadanos? Concienciándolos más del uso del transporte público, aumentaríamos el uso del mismo y reduciríamos de manera drástica el transporte privado.
No sería del todo descabellado que el dinero que se iba a invertir en el tranvía fuese en su lugar a parar a una mejora de la información, de las flotas, las líneas y los nudos de comunicación de los autobuses (por ejemplo la Plaza Esteve)
Lo mío sólo es una opinión, quizá no la más acertada, pero creo que muchas veces, una solución mejor y más factible podemos encontrarla pensando tan solo un poco más.
Fuentes:
http://www.diariodejerez.es/article/jerez/340558/la/junta/presenta/trazado/futuro/tranvia/jerez.html
http://www.skyscrapercity.com/showthread.php?t=728144
http://treneando.com/2011/09/03/el-ayuntamiento-de-jerez-renuncia-al-tranvia-que-proyecta-la-junta-para-la-ciudad/
http://www.lavozdigital.es/cadiz/v/20110901/jerez/ayuntamiento-jerez-rechaza-formalmente-20110901.html
Imágenes:
http://treneando.files.wordpress.com/2011/09/jerez_tram_project-svg.jpg
http://1.bp.blogspot.com/-d6v_3xjIq2o/TbWFfKPVAaI/AAAAAAAAHUs/ZD9HvrzarLw/s1600/tranv%25C3%25ADa%2B2.jpg
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