SEMANA 8

            UNWIN: PARA UN URBANISMO PARTICULAR. Manuel de Solà-Morales

Resulta importante señalar el debate que se abre en el texto sobre formalismo e informalismo, entendiendo como formalismo aquello que está legislado o que es así tradicionalmente, mientras que el informalismo es aquel que se apoya en las condiciones del lugar. El autor llega a la conclusión que es necesario llegar a un punto intermedio entre ambas posturas. Adaptando el proyecto a las características propias del emplazamiento, sin imponerse, teniendo en cuenta la normativa de esa ciudad.

El texto recoge una idea relacionada con los textos anteriores, “no existen dos ciudades iguales”, cada ciudad debe estudiarse como un caso particular, donde arquitectura y urbanismo den solución a la situación geográfica en la que se encuentra, su relieve, la sociedad que lo habita y las nuevas tecnologías. Esto ocasiona que cada ciudad corresponda a una trama urbana distinta.

En relación con las distintas tramas de las ciudades, en clase se lanzó la pregunta: ¿Si tenemos un tejido rural e instauramos una red muy geometrizada (como ocurrió en el Plan Cerdá), qué instrumentos usamos para resolver una arquitectura formal, buscando los ejes y acomodando el parcelario a esa trama? Este instrumento será la expropiación, llegando a un acuerdo con los propietarios (reparcelación). En principio no hay ninguna empresa, ni siquiera la propia administración, que sea capaz de comprar el territorio necesario para hacer una modificación de esta magnitud. Serán los propietarios del territorio quienes deberán invertir con la finalidad de obtener un futuro beneficio.