En mitad del siglo XXI, en un mundo dónde el terrorismo en masa se ha extendido por todas partes debido a los desacuerdos políticos y económicos de las grandes potencias mundiales, el uso de armas químicas y biológicas para la destrucción masiva se ha convertido en un hecho real y generalizado, debido a su imprevisibilidad y sus efectos nocivos, que conducen al miedo y la muerte.
En 2042, Marsella fué alcanzada por una enorme bomba lanzada por un avión militar sirio, que propagó un agente químico letal en una parte de la ciudad, haciendo que el área fuera inhabitable e inutilizable. El gobierno tomó medidas, lo antes posible, para aislar el área con una enorme cúpula de vidrio, de modo que los agentes químicos permanezcan atrapados en su interior y no se diseminen por toda la ciudad.
Para remediar la falta urgente de área edificable disponible, se empezó a proyectar teniendo en cuenta las nuevas tecnologias para desarrollar una ciudad en vertical alrededor de la cúpula, hecho que permitió duplicar la densidad de población en este sector.
El proyecto se inspira en el Movimiento Metabolista, una corriente arquitectonica fundada en 1959 por un grupo de arquitectos y urbanistas japoneses, surgida despues del caos general de la segunda guerra mundial por esta necesidad de devolver orden y regularidad a la ciudad. Fue una manera de regenerar la ciudad aplicando el concepto de células como unidad base que se genera a partir de un núcleo y empieza a desarrollarse potencialmente al infinito.
En las imagenes abajo se puede apreciar el concepto de "nucleo" y de "célula" de los cuales surgió nuestra idea.
En nuestro caso, los pilares son el núcleo, y todo lo edificado surge a partir de éstos y se desarrolla alrededor de un enorme polo de confinamiento que es la cúpula.
La cápsula es la última forma de construcción prefabricada e industrializada. No es sólo un sistema de producción en masa (reducción de costes y tiempo, control de calidad). Se trata también de introducir cambios cualitativos en los procesos constructivos: generar un sistema selectivo de combinación de partes que ofrezca flexibilidad, variedad y facilidad en la sustitución de componentes.
En particular, las células habitativas se distribuyen “pegadas” a cada pilar, como una composición volumetrica variable de viviendas cuya orientación y disposición permite crear espacios diferenciados y también permite la llegada de luz. La vía de acceso a cada vivienda se encuentra en el interior de los pilares, con un ascensor que sube y baja a todos los niveles.
Los pilares, que tienen alturas diferentes (300m, 200m, 100m) se encontrarán conectados a través de una serie de calles de diferente ancho: las calles perimetrales que conectan directamente los pilares entre si son de 20m de ancho, asì que pueden incorporar diferentes usos (peatonal y para bicicletas) y servicios (tiendas de utilidad diaria: mercados, farmacias...); al final, por una cuestión de sostenibilidad y de mejor calidad de vida, decidimos de no permitir el acceso a los coches en la ciudad utopica, asì que hay mucho mas espacio por las personas.
Además, se disfruta de la forma circular de la cúpula para crear una calle radial de 15m de ancho que genera un lugar público y colectivo, de encuentro social, donde posicionar zonas de ocio y de comercio.
Por último, la calle radial se conectarà a los pilares a través de otras calles mas estrechas (10m), de simple pasaje, asì que ningún elemento esté aislado del resto. Se creará un reticulo donde la unidad es parte del todo.