Brasilia 2050

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Este proyecto parte con una decisión general que es la de realizar un “podio” que inicia en la cota más alta y se aplana a lo ancho de un eje longitudinal formando un desnivel de 5,5 m. Con esto, se ha aprovechado el espacio que se libera bajo este para construir un tanque de tormentas que recoja todo el agua de la pendiente hacia arriba. El agua llega a través de un colector principal situado en el eje transversal, que a su vez recoge el agua de derivaciones secundarias más pequeñas como canalones o del propio terreno. Una vez el agua llega al tanque de tormentas, se regula y se depura para, o bien bombearla a través de un canal longitudinal y abastecer al resto de la ciudad, o bien se deja caer con la propia pendiente y abastece a los campos de cultivo y al resto de la ciudad que se enceuntre inferior a esa cota. Por otra parte, el podio de hormigón se adapta al terreno para generar plazas y lugares de ocio que a su vez interactuan con los edificios existentes para generar entradas a doble altura. Otra función del podio es el estrechamiento de la calle principal lo que provoca que esta sea transitable y elimina la barrera peatonal existente. Las demás calles se unifican y se iguala su trazado para disminuir lo máximo posible el tránsito con vehículo privado y fomentar el uso de otros medios como la bicicleta o simplemente andando.