Charley sueña con ir a trabajar en bicicleta, pero vuelve a la realidad. Va en transporte público, hacinado, y llega al trabajo reventado. Se le ocurre reunir a las personas de edificios colindantes.

                Allí discuten el crecimiento de la ciudad: el paso de la pequeña ciudad de campo a la ciudad actual con la aparición de la industria y ferrocarriles… pero todo deriva en un caos.

                Por lo tanto, se plantea comenzar una ciudad de nuevo en la que no se podrán repetir los errores de antaño y en la que podrá lograr el bienestar con el que soñaba en un principio. Para ello se plantea cuestiones como la necesidad de un centro urbano, cines, tiendas, parques, zonas verdes… y el emplazamiento de todo ello con el objetivo de hacer felices a las personas que viven allí. Y Charley nos invita a intentarlo.

                Desde mi punto de vista, la situación de empezar de cero una ciudad me resulta bastante incierta y utópica, aunque podría ocurrir en una situación extrema como una catástrofe, pero siempre tendríamos en cuenta el entorno, clima y las edificaciones o, en este caso, ciudades vecinas y recurriríamos a lo que ya hay y no podríamos acuñar el término “empezar de cero”.