Parece lógico pensar, que el papel del arquitecto en el trazado y configuración de una ciudad es esencial, sin embargo, durante este curso he podido aprender que no es del todo cierto, puesto que el aspecto final de una ciudad es el resultado del trabajo y aportaciones de muchos sectores, no solo el arquitectónico, sino también a nivel de transportes, la propia topografía del lugar, y desde luego, el propio ciudadano.

Sin embargo, sí pienso que nuestra aportación puede ser bastante interesante e importante, ya que quizás nos centramos más en esa forma de sentir o ver el entorno que tiene los ciudadanos, variables que quizás otros campos no analizan tano. Por tanto, somos capaces de configurar ciudades con zonas o aspectos que te hacen sentir emociones positivas, como las vistas de una sierra entre edificaciones o la monumentalidad de algunos de ellos.

Como conclusión, diría que el arquitecto puede aportar principalmente emociones, seguido de otros aspectos como la funcionalidad, la organización, aspectos que desde mi punto de vista, otros sectores no tienen muy en cuenta, o por lo menos, no lo reflejan de igual forma.