"Ahora vivimos en un mundo sin Urbanismo, sólo con Arquitectura, [....] su seducción está en su limpieza, en cómo excluye [...] per la Arquitectura también consume"

La idea de privatizar, de separar espacios ha abarcado los valores de nuestra sociedad. Necesitamos identificar cada uno de los estímulos que percibimos para poderlos clasificar y poder emitir un juicio, y eso resulta más fácil si podemos ejercer un control sobre esos estímulos. Me planteo la posibilidad de que esto radique en nuestra proyección temporal inherente que es la que nos lleva a intentar controlar nuestro futuro.

Al ser la Aquitectura y el Urbanismo un reflejo tan claro de la sociedad, y al mismo tiempo tan opuestos y complementarios entre sí, observamos que la primera impera por el concepto implícito en ella de refugio. Si delimitasemos las competencias de ambas disciplinas nos damos cuenta de ellas al cruzar el umbral de la puerta que da a la calle. Sumergidos en esta idea, hoy en día preferimos estar entre cuatro paredes, sabiendo o intuyendo quiénes y qué cosas son las que estan a nuestro alrededor e intentando predecir en secreto cómo pueden afectarnos.

En este punto, Rem Koolhas dice que cada vez la Arquitectura adquiere más peso, y más especializado mientras el Urbanismo desaparece. Se trata de la ejecución del espacio exterior por el interior, del público por el privado. 

¿Por qué no podemos sentirnos cómodos con lo desconocido?¿Por qué no podemos adquirir una actitud de adaptación y no de imposición?¿Por qué necesitamos sentirnos identificados con nuestro entorno si todas las personas tienen raíces y una identidad innata?