El video hace una fuerte crítica al urbanismo actual, en el que las ciudades se proyectan y modifican pensadas para los vehículos. Algo que me ha resultado muy curioso es como de igual modo que creando nuevas carreteras aumenta el número de coches, aumentando el número de aceras y calles peatonales lo hace el número de peatones. Frente a este modelo maquinista y funcionalista, en el que la ciudad simplemente debe cumplir un fin económico, y de interés para las corporaciones y políticos, se propone un urbanismo a la escala del ser humano, un urbanismo que apueste por la ciudad horizontal, peatonal, abastecida de transporte público, y repleta de zonas verdes y que de verdad comience a tener en cuenta a esas personas. Un urbanismo afable con el ser humano, que no se oponga a él, ni le dé la espalda, que favorezca la sociabilidad frente a ese autismo de las ciudades estadounidenses, y que de este modo enriquezca nuestras vidas.