07_ CHRISTOPHER ALEXANDER _ La ciudad no es un árbol

Creada el 18 de Enero de 2016 a las 11:20 por Rf17

Proyecto: Urban Games 2015
Tema: Diálogos
Coordinadores: abarca dacama

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Comentario sobre el texto de C. Alexander

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El autor nos diferencia entre dos tipos de ciudades: las llamadas ciudades naturales y las ciudades artificiales.
Las primeras son las que han sido creadas espontáneamente; según las necesidades de los ciudadanos han ido creciendo y transformándose a lo largo del tiempo. Ha primado la funcionalidad que ha sido necesaria en cada momento. Esta manera de crecer hace que el buen funcionamiento de la ciudad sea más fácil de lograr, puesto que los habitantes la hacen como suya, la hacen en función de sus necesidades y deseos, asegurándose así que su uso va a ser exitoso. Este carácter espontaneo del crecimiento asegura también la no sectorización del espacio en la ciudad, nada se queda aislado y en todos los lugares podemos encontrar elementos de todos los sistemas que intervienen en una ciudad.

Por el contrario nos encontramos con las ciudades artificiales, que son aquellas que han crecido deliberadamente y planificadas. Son ciudades en donde reina la fragmentación. Han sido pensadas por personas seguramente ajenas a la propia ciudad, casi siempre sin conocer ni estudiar lo que esa ciudad (sus ciudadanos) necesitaba en cada lugar. Son repetitivas e inconexas con la población que las habita. Las funciones están separadas unas de otras y ninguna se enriquece de las demás.

Explica la diferencia entre ambas partiendo de los conjuntos de elementos que intervienen en una ciudad qué sistema generan éstos conjuntos en una y otras ciudades, es decir, cómo se relacionan entre sí estos conjuntos. Las ciudades naturales tienen un esquema estructural en donde los conjuntos se apoyan y se incluyen unos en los otros, no quedando ninguno inconexo de los demás y participando los unos de los otros. Sin embargo en la ciudad planificada los conjuntos actúan por separado, sin relacionarse y sin vivir concordantes ni participativos unos con otros.

Reivindica, como en otros textos, la rehumanización de las ciudades. Pensar que las ciudades se crean y desarrollan para albergar en ellas los deseos y necesidades de las personas que la habitan. Conocer esas necesidades es la clave para saber darles respuesta y que una ciudad funcione. Una ciudad pensada en su totalidad, en todos los conjuntos que en ella intervienen para no aislar ninguno.

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