Texto extraido de una entrevista del diario "El país" al arquitecto y urbanista Manuel De Solá Morales, donde expresa sus opiniones sobre el urbanismo actual, la arquitectura y las perspectivas constructivistas futuras.

Coincido totalmente con el punto de vista que da de la arquitectura como una obra eminentemente material, sin la materialidad, la arquitectura se ve deborada por una especulación teórica sin límites, que cumple su función a la hora de expandir horizontes y buscar nuevos desafíos, pero siempre priorizando la constructividad de la pieza arquitectónica.

Muy curioso el caso de la base para submarinos de Saint Nazaire, donde reconvierte un espacio histórico con una connotación tan negativa para la población en uno de los nuevos centros culturales y sociales de la ciudad, demostrando como la arquitectura encuentra su sentido en el tiempo al ser aprovechada en cada etapa histórica de la manera en que más ayude a la sociedad, no negandole su existencia como sería sencillo pensar.

También me llama la atención la reflexión que hace sobre los estudiantes y las escuelas de arquitetura españolas, con como desde la escuela se nos inducen ciertos pensamientos preconcebidos, no siempre correctos, y como muchos estudiantes de arquitectura se fruestran al intentar alcanzar la fama y el poder de los arquitectos más famosos a los que tienen como idolos, aunque en la mayoría de los casos, no son estos los que hacen la mejor arquitectura, la que más ayuda a avanzar a la sociedad y es más sensibles con las necesidades de la ciudad o el entorno en el que se encuentra esa arquiectura.

Fotografía "landscape urbanism intepretive mapping" de Gauthier Durey.