Este texto habla sobre la definición de espacio público y de cómo actualmente degradamos su significado llamando espacio público a cualquier relleno de espacios no edificados que se han ido creando constantemente con formas geométricas planas. Un espacio público es mucho más que eso, se trata de los edificios que hay a su alrededor, de las personas y las relaciones y actividades que ejercen con el entorno… no debe verse como un espacio autónomo con lógica interna como dice el autor en el texto.

Para que un espacio público tenga calidad debe expresar significados cívicos, sociales, culturales, funcionales y estéticos. Las modas, el derroche, la utilización de objetos estéticos colocados al azar, pueden desviar el verdadero concepto de espacio público.

Un espacio público con carácter homogéneo que no favorece la presencia de relaciones y diferentes actividades reduce la urbanidad. Estos espacios deben favorecer la diversidad en todos los aspectos para que haya vida y no se vea como algo mecanizado.

Para hacer un buen espacio urbano hay que conocer la ciudad y la forma de vida de las personas que la habitan, debe relacionarse con el entorno, no ser pensado de forma aislada.