En este texto se profundiza sobre los ejes, estudiando en profundidad varios ejemplos de ellos.  Tras leer el texto coincido con muchos de los aspectos que deja entrever la autora. 

Se tiende a ver con carácter nostálgico el trazado sinuoso e incluso laberíntico de algunos tejidos urbanos. Pero creo que es imprescindible y necesario para el crecimiento y funcionamiento de la ciudad actual la existencia de ejes principales. Estos ejes no entendidos como ejes infinitos como es el caso de la calle lineal de Arturo Soria y cuya ineficacia ha sido demostrada sino ejes como espacios centrales de los que se despliega el tejido urbano.

A veces se considera que los ejes son agresivos con las preexistencias, que no tienen en cuenta la topografía, las cuestiones culturales,… Al igual que tendemos a creer que una calle recta es más agresiva que una calle serpenteante o lo que denominamos orgánica. Creo que ni los ejes ni las rectas cumplen estas cualidades injustamente otorgadas debido a malas intervenciones. Simplemente hay que estudiar los diferentes casos, no existe un dogma, no en todos los casos una "Gran Vía" es una mala decisión ni viceversa.

Además creo que los ejes cumplen todas las características de la calle, tienen la virtud de atender a cuestiones de gran escala como son las relaciones de la propia ciudad, articulando, y a su vez atienden los detalles a una escala menor como puedan ser las fachadas, el espacio interior, la sección de la calle, los extremos, la topografía o  la piel de la calle como diría Solà- Morales.