Este texto se trata de un manual que nos ayuda a ver como van a ser los nuevos trazados y las nuevas ciudades en el futuro. 

Solà-Morales nos habla de dos conceptos a los que llama por un lado formalismo que se trata de un urbanismo que se rige por las leyes y que está condicionado por las referencias historicas; mientras que por otro lado se establece el concepto de informalismo en el cual el urbanismo se integra perfectamente en el lugar y se crean nuevos espacios y referencias que permiten la diversidad y las diferencias. Yo pienso que hay que ir de los particular a lo general.

Estudiando estos conceptos podemos encontrar ejemplos claros como puede ser el ensanche de Barcelona el cual es un plan formal que a la vez se convierte en informal porque se crean elementos causados o permitidos que permite que ocurran nuevas cosas y espacios y cambie totalmente la visión de la ciudad. Sin duda, esto hace que se vaya regenerando el plan del ensanche de Barcelona constantemente.

Otro ejemplo se sitúa en Granada y es el barrio del Albaicín el cual visualmente se puede establecer como un urbanismo informal por la presencia de la diversa tipología de sus calles y espacios irregulares que se van creando aleatoriamente y que desembocan en plazas o avenidas pero también se establece la forma, un urbanismo formal que se rige por el control de las leyes sobre las vistas hacia la Alhambra y por otro lado de los volúmenes y alturas que se establecen en las viviendas o comercios del barrio.

A modo de conclusión yo pienso que un buen urbanismo tiene que tener un poco de los dos conceptos explicados anteriormente por lo que se establece la informalidad dentro de la formalidad.