En este fragmento del libro de Kevin Lynch: ''El Arte De Planificar El Sitio'', el autor nos habla sobre una de las fases de la creación de un artista: el emplazamiento. En mi opinión, el sitio, el lugar, es una de las primeras ''herramientas'' a tener en cuenta para utilizar en nuestro proceso de creación. Debemos de establecer una relación entre el lugar preexistente y nuestra actuación en él, consiguiendo que nuestra obra se impregne del propio ''espíritu del lugar''. 

Como bien dice el autor, el artista debe de comprobar con el tiempo, que su diseño ha dado sus frutos. Si esta comprobación es correcta y el proyecto ha tenido éxito, eso no quiere decir que debamos de extrapolarlo a cada proyecto que hagamos (error comúnmente cometido por muchos de los arquitectos actules), sino que es el proceso realizado el que debemos de repetir en el futuro. 

Un aspecto que Lynch destaca en este texto es la relación que se debe de establecer entre el diseñador y el usuario. Define sitio como: ''conjunto de objetos y actividades'', actividades realizadas por un conjunto de personas que van a habitar ese sitio. En los pasos que el autor determina para emplazar una obra, aunque posteriormente enfatiza en que el proceso emerge gradualmente, es cierto que coloca ese acercamiento y relación con los usuarios de la obra en primer lugar, hecho con el que estoy de acuerdo, al igual que comenté anteriormente en el texto de José Fariña, no debemos de olvidar que estamos creando elementos para que puedan ser habitados.

Rubén Toledo Freire