El texto habla acerca del problema en el que se encuentra la ciudad de Oporto debido a la gran cantidad de turistas que se encuentran en ella a diario.

Realmente pienso que los turistas no son el problema, el orígen de este caos proviene de las decisiones tomadas por la ciudad a la hora de dedicarse a la atención exclusiva del turista en lugar de a sus propios ciudadanos.

Esto, además de acabar con la esencia de la propia ciudad, terminará siendo contraproducente, ya que lo que realmente atrae el turismo a una ciudad es toda la ciudad en su conjunto, su gente, comida, arquitectura, costumbres... Por lo tanto, si ésta prescinde de todo ello y se centra en crear un parque de atracciones únicamente para el disfrute del turista, no habrá ningún tipo de interés en viajar para visitarla.