“Ver el ruido” parece ser una idea completamente ilógica. Sin embargo, no lo fue tanto para la firmaUrban Matter Inc. que buscó hacer esto una realidad bajo un tramo elevado de la autopista Brooklyn Queens Expressway, en Nueva York.

En una de las veredas de este lugar colocaron pórticos con 2.400 luces LED que se iluminan con distintas frecuencias a medida que capta los sonidos -o el ruido- provenientes de la intersección de la autopista con las avenidas Park Avenue y Navy St. Since que pasan por abajo.

La intervención, bautizada como Silent Lights, tenía como gran objetivo hacer que caminar por este lugar fuera una experiencia más interactiva, placentera y sensorial. Si bien esto se logró, también se consiguió rehabilitar uno de los espacios bajo los tantos pasos elevados que tienen las autopistas urbanas.

Cada una de las puertas tiene instalado un micrófono que graba los sonidos y después fija los movimientos y colores de las luces según la frecuencia. Así, quienes caminen por aquí pueden ver el sonido y su intensidad representado en las luces que se mueven por los pilares de los pórticos.

El origen de este proyecto se remonta a un par de años atrás cuando sus creadores lo subieron a Kickstarter diciendo que lo colocarían entre Carroll Gardens y Red Hook, una intersección con mejores accesos ubicada a casi dos kilómetros del lugar en donde finalmente se instaló. Por este motivo, y por el éxito que ha tenido Silent Lights, no se descarta repetir la experiencia, pero en otro lugar de la misma autopista más transitado.

El siguiente video muestra el proceso de instalación de las puertas y la intervención en funcionamiento.